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Ayer se celebró como estaba anunciado, la inauguración de este nuevo instituto, cuya fundación se ha debido a la iniciativa del intendente Sr. Seeber, y cuya organización ha sido obra meritoria del director del Museo Sr. Adolfo Carranza.
A las dos de la tarde llegaba al local en que se ha instalado en la calle Esmeralda 848 el intendente municipal Sr. Goldini, acompañado del señor secretario de la intendencia Sr. Williams y del secretario privado del intendente Dr. Osvaldo Piñero.
Momentos antes habían empezado a llegar los invitados, que recibían un catálogo provisional de los objetos que constituyen el Museo, y auxiliados con la mayor deferencia por los miembros de la Comisión recorrían las cuatro salas en que aquéllos se encontraban instalados.
La concurrencia era numerosa y selecta; de ella formaban parte muchas distinguidas damas y señoritas de nuestra sociedad, que mostraban el mayor interés en informarse de la historia y episodios nacionales relacionados con cada uno de los objetos allí expuestos.
Entre éstos se encuentran autógrafos interesantes y muy bien conservados, armas y trofeos de tradición gloriosa, estandartes de épocas lejanas y algunas raras curiosidades como la colección de cuadros representativos de la conquista de Méjico, que llaman con justicia la atención de los visitantes.
Al pie de esta noticia publicamos el catálogo provisional que la Comisión ha formado de los objetos hasta ahora reunidos, cuyo número no llega a doscientos. Más tarde se publicará el catálogo descriptivo ilustrado que se está confeccionando, y que no ha podido concluirse para la fiesta de inauguración por el deseo de abrir el Museo lo antes posible y por el mucho trabajo que una obra de esta clase reclama.
Sirvióse luego un lunch, que se había preparado en una de las salas más capaces del Museo, y allí comenzaron entonces los indispensables brindis y discursos, que forman el principal aliciente de estas solemnidades.
Hizo primeramente uso de la palabra el director del Museo Sr. Adolfo Carranza exponiendo en frases muy discretas, como había nacido la idea de la fundación y como por su parte había contribuido a ponerla en práctica con los escasos elementos, de que hasta ahora se ha dispuesto para constituir el Museo Nacional.
Siguióle el Sr. Goldini, que hizo la justicia a la tarea desempeñada por el Sr. Carranza, tributándole con este motivo sus elogios, y declaró abierto el Museo.
Entre otras personas cuyos nombres sentimos no recordar, el ministro de Chile Sr. Guillermo Matta que aludido por uno de los concurrentes encareció la utilidad de las colecciones de objetos históricos y la necesidad de perseverar en la obra comenzada; y el Sr. Barra, que tuvo palabras muy entusiastas, al recordar que aquellas reliquias que traían a la memoria las grandes virtudes de sus poseedores, algunos de los cuaes había tenido la fortuna de tratar, porque ha vivido mucho, y al recomendar el interés que encierran para la educación de las generaciones los estudios y descubrimientos históricos y arqueológicos.
A las tres y media terminaba tan agradable como patriótica fiesta, que fue amenizada por los acordes de dos bandas militares.
En cuanto a la impresión que produce la visita al Museo, hay que comenzar por reconocer que todos los objetos han sido instalados en el mejor orden, bien clasificados y expuestos, de manera que se pueda formar idea cabal de cuánto encierra fácilmente y en muy poco tiempo; pero hay también que observar que ha nacido pobre y que todos estamos en la necesidad de contribuir a enriquecerlo.
Se trata de una obra patriótica, y a levantarla deben cooperar los particulares, las asociaciones y las provincias, para que el Museo llegue a ser el templo de las grandezas nacionales. Los egoísmos privados deben ceder ante el interés público, tanto más, cuanto que los poseedores de objetos históricos importantes pueden poner su nombre al lado de cada donativo y hasta concebir que sus colecciones, si son muy numerosas, sean instaladas en una sala especial que lleve su nombre igualmente.
Otro tanto debemos decir de las provincias. En todas ellas se conservan objetos preciosos para ilustrar la historia nacional, y en algunas como Córdoba o Santa Fe hay una verdadera riqueza de reliquias patrias. Traerlas al Museo Nacional sería preparar el panteón, que encerrará dentro de sus muros a todos los dioses lares, y tejer los más estrechos lazos entre todos los miembros de la patria común.
Si la historia es la memoria de los pueblos, la religión de las tradiciones debe tener un culto en el Museo Nacional, para mantener vivo el fuego del patriotismo.
A contar desde hoy, el Museo estará abierto al público todos los días festivos desde las doce de la mañana hasta las cuatro de la tarde.
Y aquí ahora el catálogo provisional de los objetos:
Guirnalda de plata y oro que las damas de Potosí regalaban al General Manuel Belgrano en conmemoración de las batallas de Tucumán y Salta, retrato al óleo del General San Martín hecho en Lima en 1812, id. al óleo del General Belgrano hecho en Europa en 1815, autógrafo de la Junta Gubernativa de 1810, id. del Gobierno Provisorio de 1813, Plano del camino de Buenos Aires a Chile en 1810, casaca, medallón, sellos y chines que pertenecieron al General San Martín, elástico, charreteras y bandas que pertenecieron al mismo, casaca del General Guillermo Brown, estuche conteniendo objetos que pertenecieron a Don Bernardino Rivadavia y que se trajeron de Cádiz, bastón del General Cornelio Saavedra, pistola del General Belgrano, puñal y gorro del Coronel Martín Lacarra, retrato de Bolívar, ladrillo de la casa en que nació San Martín, El paso de los Andes del artista Ballerini, La Batalla de Maipú del Dr. Fernández Villanueva, parte de la batalla de Chacabuco, id. de la batalla de Maipú, la capitulación de Salta, piezas de la vajilla del General San Martín, banda del General San Martín que llevóen la Expedición a Chile, catre-cofre del General San Martín, sextante de campaña que sirvió al General San Martín, cuando llevó a cabola expedición a Chile, pequeño escritorio del General San Martín, pistolas del General San Martín, retrato del General Juan E. Pedernera, id. del mismo en 1826, uniforme del mismo, retrato del General Manuel Escalada en 1824, id. del mismo en 1870, uniforme del mismo, retrato del Brigadier General José María Zapiola en 1853, retrato del mismo en 1873, uniforme del mismo, retrato del General Jerónimo Espejo, uniforme del General Las Heras, retrato del General Tomás Iriarte, uniforme del mismo, retrato del Coronel M. Rojas, escudo de la Asamblea General Constituyente del año 1813, retrato del CoronelJorge Velasco, id. del General Rufino Vido, uniforme del mismo, retrato del Coronel Hipólito Bouchard, patente del ministro plenipotenciario expedida por el Protector del Perú, retrato del General Lucio Mansilla, sable del mismo, foja de servicios del mismo, sable del General Martín Rodríguez, caja en que se trajeron los restos de Rivadavia, retrato del Coronel José Segundo Roca, id. del Coronel Martín Hidalgo, Batalla de Ayacuchopor Juan Correa Morales (1825), retrato del Dr. Nicolás Rodríguez Peña, autógrafo del General colombiano Mariano Montilla, piezas de música compuestas por el General José A. Páez, bastón que perteneció a los generales colombianos Nariño (en 1810), Zubiet (en 1820), Izárraga (1849), muletilla en que se cargaron los restos del Libertador Bolivar al trasladarse a Caracas en 1834, retrato, foja de servicios y condecoraciones del Coronel Guatí, espada del Comandante Miguel Cajaraville, retrato del Coronel Francisco Díaz, autógrafo del General colombiano Manuel Valdes, bandera de la división del Ejército de los Andes que pasó a Chile bajo los órdenes del Comandante Zelada, retrato del General Mariano Lecochea, autógrafo del General Carlos de Alvear, retrato del Coronel Martín Lacarra, id. del Coronel Eduardo Escola, uniforme del mismo, retrato del General Nicolás de Vega en 1850, id. del mismo en 1876, piezas del uniforme del mismo, retrato del General Clemente Zárraga, id. del mismo en 1828, uniforme del mismo, primer parte de la batalla de Maipu, portapliego de un husar brasilero, tomado en la batalla de Ituzaingó, dos medallas que pertenecieron al General Manuel Corvalán, dos medallas de oro del General Lamadrid correspondientes a las batallas de Tucumán y Salta, escudo de oro de las piedras del General B. Aráoz, cordones de Ituzaingó del Coronel Jorge Velasco, retrato del Coronel Valerio Sánchez, id. del Coronel Victoriano Corvalán, id. del Coronel Juan P. Pringles, id. del General Marcos Balcarce, id. del General Martín Rodríguez, id. del General Juan José de Viamonte, id. del General Ramón A. Dehesa, id. del General Angel Pacheco en 1820, id. del General Florecindo Alvarado, id. del General José Rondeau, id. del General Enrique Martínez, id. del Coronel José de Olavarría, id. del Coronel Isidoro Suárez, id. del General Juan O´Brien, id. del General José Pico, id. del General Manuel Corvalán, bandera del segundo batallón de la Segunda División de G. N. de Buenos Aires en la Guerra del Paraguay, bandera del Tercer Batallón de la Segunda División Buenos Aires, bandera del Primer Batallón del Primer Regimiento de la División Bueons Aires, estandarte del Regimiento San Martín, bandera del Segundo Batallón del Tercer Regimiento de la Primera División, bandera del Primer Batallón del Tercer Regimiento de G. N. de Buenos Aires, bandera del Cuarto Batallón de G. N. de campaña, escopeta de Madama Lynch, machete de abordaje paraguayo, un tambor paraguayo, trozo de la cadena que defendía el paso de Humaitá, dos morriones paraguayos, el ministro inglés Jorge Canning, tambores paraguayos, banderas de la Guerra del Paraguay, armas usadas en la misma, plato del vapor "Marqués de Olinda", proyecto de corona de López del Paraguay, retrato del General Las Heras, gorro de la división correntina que vino a Caseros, dragones del César Díaz, puñal de un mazorquero, retrato del CoronelVicente González, litografía y poesía del año 1820, autógrafo del Presidente de la Sociedad Popular Restauradora Julián González Salomón, autógrafo del Coronel Mariano Maza, chal de vicuña que tenía el General Juan Lavalle cuando fue muerto, autógrafo de Aldao, caja en que trajeron los restos del General Juan Lavalle en 1857, retrato del General Manuel Hornos, traje de seda que pertneció al General Juan Lavalle, cuadro representando la instalación de la primera Junta del crédito público, bala que derribó al General Mansilla en Obligado, banderas del Ejército Libertador en 1852, espada que llevaba el General José María Paz en la batalla de Caguazú, boleadoras con que se aprisionó al General José María Paz en 1831, espada del General Juan Lavalle, espadas del General Manuel Hornos, retrato del General Justo José de Urquiza con su firma autógrafa, autógrafo del Coronel Jorge Velasco, autógrafo del Gobernador de Tucumán Marco Avellaneda, mesa en que el General Juan Lavalle escribió la nota está sobre ella regalada por Alberto de Solá, jarrón de porcelana con el retrato del Gobernador Manuel Dorrego, máquina infernal que le mandaron a Rosas, balas del combate de Obligado, retrato del General Lavalle, soldado de la época de Rosas, lámina de Oruro, retrato del Virrey del Pino, espada del General Prado Zabala, Don Manuel Latorre, duodécimo obispo de Buenos Aires, reloj con que obsequió el Regimiento 71 irlandés al Hospital de Eremitas por sus atenciones en 1807, estandarte del alferez real de la ciudad de Buenos Aires, reloj que obsequió el General Beresford al Cabildo de Buenos Aires en 1806, autógrafo, retrato y cráneo del Dr. Francia, tirano del Paraguay, escudo de armas del antiguo Cabildo de Buenos Aires, escudos españoles de la época del coloniaje, bastones de cabildantes de la Ciudad de Buenos Aires, cañón tomado de las tropas inglesas que invadieron esta ciudad en 1806, estandarte que trajo don Juan de Garay a la fundación de Buenos Aires en 1580, bandera del Regimiento de "Gallegos" durante las invasiones inglesas del año 1807, retrato de don Pedro Melo y Biyena, retratos de Felipe V y Gabriela de Saboya, retratos de Carlos II y María Ana de Austria, retrato de don Francisco de Paula Sanz, grabado representando la entrada de los ingleses a Buenos Aires en 1807, cuadros representativos de la conquista de Méjico, retrato del General Beresford, copia del estandarte del conquistador Pizarro, casaca del Coronel Cerviño, gualdrapa de la montura del alferez real de Buenos Aires, cerraduras y llamador del antiguo fuerte de Buenos Aires, dos espadas de la conquista, anteojos del General Beresford, cartera que perteneció al General inglés Lewison Yower, trozo de madera de la primer fortaleza de Corrientes, machete del Regimiento 52 inglés, balas arrojadas por los ingleses al fuerte en 1807, campaña de las misiones correntinas.
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